Actividades para ver cómo reacciona tu equipo ante dilemas éticos, emociones o roles dentro del grupo
Hay dinámicas que entretienen.
Y luego hay dinámicas que despiertan debates, sacan a la luz valores y te muestran el alma de un grupo.
Las tres que te traigo hoy hacen justo eso: van un paso más allá. Son perfectas para descubrir cómo piensa tu equipo, cómo se comportan bajo presión, y cómo se relacionan entre ellos.
1. La dinámica del paraguas
Una de las más potentes que conozco. Ideal para hablar de empatía, justicia, egoísmo y negociación.
¿Cómo funciona?
Tres personas salen fuera del aula.
Dentro, colocas tres sillas, cada una con un sobre encima (A, B y C) y un único paraguas a su lado.
Lees al resto del grupo el contenido de los sobres. Cada uno describe una situación crítica en la que el paraguas parece necesario:
Sobre A: entrevista de trabajo.
Sobre B: cita con la persona de su vida.
Sobre C: recoger a su hija enferma de la guardería.
Entran los tres voluntarios. El grupo les asigna una silla sin que ellos conozcan aún su historia.
Al leer el sobre, cada uno actúa según su urgencia… y suele haber conflictos por el paraguas.
Reflexión clave: todos creen tener una buena razón. ¿Quién lo merece más? ¿Qué pesa más: el amor, la salud o el trabajo?
Una dinámica brutal para generar conversación, debate ético y conexión emocional.
2. La rueda del equilibrio
Una herramienta visual que permite a cada persona hacer una “radiografía” rápida de su vida actual.
¿Qué necesitas?
Una plantilla circular dividida en áreas vitales:
Amigos, Diversión, Salud, Familia, Economía, Estudios, Desarrollo personal…
Cada persona marca en qué punto se encuentra ahora en cada área (de 0 a 100).
Al unir los puntos, se forma su “rueda de la vida”.
Si la rueda está equilibrada, ¡a rodar!
Pero si hay picos o valles… es momento de reflexionar.
Pregunta clave:
“Si esta rueda fuera la de tu bicicleta… ¿crees que podrías avanzar?”
Muy útil para fomentar el autoconocimiento y el diálogo personal sin forzar.
3. El Zeppelin
Una dinámica de roles, toma de decisiones difíciles y negociación a muerte.
¿La historia?
Una aeronave en problemas. Solo hay una salida: una persona debe saltar para salvar al resto.
Cada participante representa un rol (político, médico, profesor, basurero).
Tienen que debatir, argumentar, convencer… y decidir juntos quién abandona el Zeppelin.
No se permite votar. No se permite sorteo.
Solo vale el diálogo.
¿Qué se pone en juego?
La forma en la que cada uno se defiende (o acusa).
Cómo negocian y gestionan el conflicto.
Qué valores priorizan: utilidad, justicia, igualdad…
Una actividad tan divertida como reveladora. Y sí: saca más información en 10 minutos que 5 reuniones.




